Hoy os traigo una decoración muy interesante para vuestras cupcakes y más teniendo en cuenta que se aproxima Halloween, para esta decoración he usado boquilla Wilton Color Swirl que permite usar tres colores para decorar las cupcakes. He preparado una deliciosa crema de queso y he usado tres colores de Halloween: negro, morado y naranja. Para terminar la decoración he usado unos caramelos Wilton Sprinkles Skulls and Bones.
Ingredientes para la crema de queso:
- 125 g de mantequilla sin sal (a temperatura ambiente)
- 200 g de queso crema (tipo Philadelphia)
- 300 g de azúcar glas
Preparación de la crema de queso:
Poner la mantequilla (a temperatura ambiente) en el bol de la batidora y batir ligeramente. Añadir la mitad del azúcar glas (si lo ponemos todo puede que se salga del bol) y mezclamos a velocidad baja hasta que se integre bien. Paramos, añadimos el resto del azúcar glas y mezclamos a velocidad baja hasta conseguir una masa homogénea. Incorporaremos el queso crema y batimos hasta obtener una crema suave. Todo con la KitchenAid Artisan.
Preparación de la decoración:
Creo que los colores negro, morado y naranja son una buena elección para una decoración de Halloween, mi problema fue encontrar los que más se acercaban a la idea que tenía en la cabeza. Después de realizar unas cuentas pruebas me decidí por los siguientes colorantes:
- Naranja: Pasta concentrada Wilton «Orange»
- Morado: Sugarflair Colours «Grape violet»
- Negro: Kopykake Flow Paste Concentrate Kolors
No es necesario que uséis exactamente esos pero a mi me han dado un excelente resultado, el colorante negro que he usado es en gel y a mi me encanta porque da un negro muy oscuro.
Separamos la crema de queso en tres partes iguales, yo he usado tres boles. Aplicar los colorantes negro, morado y naranja a cada una de las partes y remover bien con una espátula. Llevad cuidado de limpiar bien la espátula cada vez que cambiéis de colorante para evitar transferencia de colores.
Llega el momento de usar la maravillosa boquilla Wilton color Swirl, colocaremos cada una de las tres boquillas de plástico en su respectiva manga pastelera. Hay que tener cuidado al realizar el corte de la manga pastelera, el truco consiste en introducir completamente la boquilla en la manga y marcar ligeramente el corte con las tijeras (justo donde la boquilla cambia su grosor) a continuación retiraremos la boquilla y cortaremos la manga con las tijeras justo donde habíamos marcado. Luego introduciremos de nuevo la boquilla y veremos como se ajusta perfectamente y dejamos al aire el agujero y el saliente que sirven para acoplar las tres boquillas.
Ahora acoplaremos las tres boquillas de plástico y pondremos encima la boquilla de metal (he usado una Wilton 4B) y ya solo queda enroscar el acople que sujetará firmemente todas las boquillas y las mangas pasteleras.
Rellenamos cada una de las mangas con un color, a mi me gusta usar una pinza para asegurar cada una de las mangas y que no se salga el contenido.
Tengo un vídeo con instrucciones para realizar las cupcakes que he utilizado para esta decoración de Halloween, concretamente son mi mejor receta de cupcakes de vainilla.
A continuación retiramos las pinzas de las mangas, cogemos las tres mangas a la vez y vamos bajando la crema de queso hasta que se acerque a la boquilla y empezamos a decorar. Si al principio os sale solamente de uno o dos colores no os preocupeis, en unos segundos saldrán los tres colores y obtendréis unos bonitos efectos en la decoración de los cupcakes.
Para rematar la decoración he utilizado Wilton Sprinkles Skulls and Bones que son unos caramelitos con forma de huesos y calaveras que son una monada.
Espero que os haya gustado esta decoración de Halloween, yo me he divertido mucho usando esta boquilla y estoy encantada con el resultado final.